Esperando en la infinidad del tiempo,
Suspirando y cambiando,
Nada tiene ya sentido, todo cambia a pesar de que me niego.
Envidio al viento por correr libre,
sin importarle el tiempo.
Añoro los libros que a pesar de los años,
sus letras son constantes.
Adoro a la luna, que sin importar la hora, siempre esta en las noches para escucharme.
Y admiro a la lluvia que me recuerda la simpleza de la vida,
porque la lluvia son todas esas gotas que soñaron con volar e ir más allá de lo que el estanque las dejaba.
Que bonito, Ale. :)
ResponderEliminarGracias, es de esos momentos de cuando me quedo viendo a la nada ;P
ResponderEliminarEse viento nos lleva y trae nombres del recuerdo al suspiro. Nos acaricia al paso y sin peso del tiempo. ¡Qué tiempos los del viento!
ResponderEliminarLa lluvia son las letras del cielo con que clama y reclama. En su sueño, en nuestras realidades...
Aplausos escritos...
Saludos en letras ;-)
Orlan!!!
EliminarGracias por la maravillosa visita y tan lindo comentario.